La Ribeira Sacra, un bello paisaje lleno de espiritualidad

Una de las zonas más bellas del interior de la comunidad gallega está constituida, sin ninguna duda, por los parajes que conforman el espacio conocido como Ribeira Sacra. Ubicada entre las provincias de Ourense y Lugo, es atravesada por el río Sil, que hace de frontera natural entre ambas provincias.

Es un territorio agreste y montañoso, lleno de escenarios impresionantes y con un ecosistema de una gran riqueza, debido a la variedad de su geografía. Dentro de sus límites encontraremos parajes realmente inolvidables y de una belleza sublime.

Uno de estos parajes son los Cañones del río Sil, un espacio imponente y de una gran majestuosidad, donde podemos contemplar algunos saltos de agua, y donde dicho río discurre encajonado entre montañas, en las cuales podemos observar algunas extensiones de viñas, que poseen la denominación de origen Ribeira Sacra. Se trata de un espacio que puede recorrerse en catamarán, un trayecto muy recomendable de hacer, ya que nos permitirá ver mucho mejor la belleza del lugar, y podremos incluso observar el reflejo del entorno en las limpias aguas del río Sil, que, no mucho más adelante, son vertidas en el río Miño.

Son varios los trayectos que realizan los catamaranes, cada uno de ellos de diferente duración, siendo el más largo un recorrido de unas tres horas, que empieza en Abeleda, una parroquia perteneciente al municipio de La Teijeira que es cruzada por el río Sil, y en la que hay un embarcadero, dentro de la provincia de Ourense. El trayecto finaliza en el paraje conocido como Os Chancís, en el que también hay un embarcadero, así como un mirador. Cabe comentar que en dicho embarcadero, desde el que también tendremos unas impactantes vistas, podemos alquilar kayaks.

Por la zona encontramos además varios miradores, a los que igualmente vale la pena acercarse, ya que desde ellos podremos disfrutar de unas vistas impresionantes de la comarca.

Uno de estos miradores es conocido con el nombre de “Balcones de Madrid”, situado cerca de la localidad de Parada del Sil, y que no es nada recomendable para aquéllos que tienen miedo a las alturas o que padecen de vértigo, ya que se encuentra encima del río, a 500 metros de altitud, ofreciendo una panorámica de la Ribeira Sacra inigualable, especialmente en los días claros. Cabe comentar sin embargo que también es muy aconsejable acercarse a este lugar en los días lluviosos y nublados, ya que entonces el paraje adquiere una misteriosa atmósfera llena de magia y de atractivo.

Foto vía: Turgalicia

Quien decida visitar la Ribeira Sacra debe saber que a la belleza del patrimonio natural del lugar se le suma la riqueza e importancia de su valioso legado histórico, especialmente en cuanto a construcciones religiosas se refiere. De hecho se trata de la comarca donde se acumulan más obras religiosas y de estilo románico de todo el continente europeo. Ello da al lugar una atmósfera mágica y mística que es detectada enseguida por el visitante, aún muchas veces sin saber a ciencia cierta el motivo de tal ambiente espiritual.

De entre las muchas obras que podemos visitar, algunas de ellas deberíamos procurar no dejar de hacerlo, como es el caso del Monasterio de San Pedro de Rocas, un impresionante edificio que se encuentra excavado en la roca natural, en un paraje que se caracteriza por la sensación de soledad y grandeza que en él se respira. La fecha de construcción del monasterio no se conoce a ciencia cierta, pero se supone que tiene su origen en el siglo VI.

Otro majestuoso edificio aconsejable de visitar es el que se sitúa en la localidad de Montederramo, el Monasterio de Santa María, que data del siglo XII y que perteneció a la Orden del Císter. O el Monasterio de las Madres Bernardas, que se halla en el término de Ferreira y que tiene una importante particularidad, ya que se trata del único monasterio de toda la comunidad gallega en el que han vivido, y todavía viven en la actualidad, mujeres.

En nuestro viaje por estas atractivas tierras no pueden faltar las visitas a alguna de las interesantes localidades que forman parte de ellas, como Monforte de Lemos, capital de la Ribeira Sacra, un municipio medieval que posee un considerable legado histórico, con obras como el majestuoso Colegio de Nuestra Señora de la Antigua, un edificio de estilo herreriano, un verdadero monumento que recibe popularmente el nombre de “el escorial gallego”.

La Ribeira Sacra no destaca, de todas maneras, solamente por su bellísimo patrimonio natural y por los tesoros que forman parte de su legado arquitectónico, sino que tiene aún otros atractivos, como su exquisita gastronomía. Sus productos naturales son de una gran calidad, como sus excelentes carnes, destacando los derivados de la matanza del cerdo, además de las carnes de cordero, cabrito y ternera. Asimismo, tienen una gran importancia en sus cocinas las carnes de caza, tanto mayor como menor.

En lo que se refiere a los postres, hemos de señalar la mantecada, así como las cerezas, las castañas y la miel. Todo ello sin olvidarnos de sus prestigiosos vinos con Denominación de Origen Ribeira Sacra.

Actualmente existe un tren turístico con el que se puede visitar la Ribeira Sacra acompañados por un guía, y con el cual podremos pasear incluso entre viñedos, disfrutando de los mejores parajes de esta hermosa comarca.

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