Casas rurales en L´Eliana

parajes de la comarca del Campo del Turia.

ENTORNO

Se ubica cerca de Valencia pero fuera del área metropolitana, en el espacio conocido como La Vallbona. Se halla a orillas del río Turia, y por su término discurren también las acequias Granotera y Nova. Se trata de un territorio llano, con cimas de insignificante altitud, que no superan los 200 metros, y se caracteriza por sus extensiones de naranjos, almendros, olivos, vid y algarrobos. Rodea la localidad el Bosque de la Cañada, una bonita zona verde muy frecuentada por los vecinos de L’Eliana para pasear, practicar deporte o simplemente respirar aire puro. En los alrededores encontramos aún otros bonitos enclaves naturales, como el parque de la Pinada o el Barranco de Mandor.

El municipio tiene un patrimonio arquitectónico de interés, como la Iglesia de Nuestra Señora del Carmen, levantada por los propios vecinos a finales del siglo XIX, y en la cual destaca su campanario de estilo neogótico. Es de resaltar la Ermita de San Elías y Santa Ana, que data del año 1600, así como la Torre del Virrey, conocida también como Torre de Baba, que se ubica a medio kilómetro del casco urbano y fue construida en el siglo XIX, a base de fortificar una antigua masía del siglo XVI. Son muy interesantes algunas muestras de la arquitectura popular de antaño, que podemos admirar en construcciones como el Molino de la Luna o la Masía del Pilar. Se pueden ver también los restos de un antiguo palacio de mediados del siglo XIX, el Palacio del Marqués de Casa Ramos.

GASTRONOMÍA Y TRADICIONES

En lo que hace referencia a su gastronomía, hay que destacar, ante todo, el plato estrella no sólo de este municipio sino de toda la provincia. Se trata del arroz, del que elaboran un sinfín de variedades, empezando por la paella valenciana, y siguiendo con otras recetas como el arroz con alubias y nabos o el arroz a banda. Otros platos destacables, entre muchos otros, son el guiso de costillas de cerdo con alcachofa o el pollo a la pepitoria.

Los vecinos de L’Eliana celebran unas fiestas patronales que se caracterizan por su larga duración. Empiezan el primer fin de semana del mes de julio y no terminan hasta el día 17 de dicho mes. Como es natural, se celebran en honor a sus patrones, que son el Cristo del Consuelo y la Virgen del Carmen. Durante estos días tiene lugar también en el municipio un interesante Mercado Medieval. También son muy celebradas en la localidad la fiesta en honor a San Antonio Abad, a mediados del mes de enero, y las de San José, en que tienen lugar las Fallas.