Cada año, cuando vamos dejando atrás el verano y van llegando los primeros fríos y las primeras lluvias, el bosque va cambiando de aspecto y adquiriendo sus atractivos tonos marrones y amarillentos.
En su interior, y aunque nuestros ojos no lo perciban, son muchas más sin embargo las novedades y cambios. Uno de ellos, es que llega un momento importante para uno de los ejemplares de animales más bellos que habitan nuestros bosques, los ciervos.
Es en otoño cuando dichos animales, encontrándose en su época de celo, empiezan a frotar sus cornamentas contra las ramas de los árboles que pueblan nuestros bosques, ya sean encinas, alcornoques, pinos o similares. Se están preparando para uno de los momentos más importantes de su ciclo vital, el reencuentro con las hembras de su especie y, por consiguiente, las luchas entre los machos con el objetivo de ser ellos los elegidos. Empieza entonces uno de los espectáculos más impresionantes de los que se pueden contemplar en nuestro país, y que hace resonar los bosques de muchos puntos de nuestra geografía debido al sonido gutural que emiten los machos. Se trata de la berrea.
Durante la misma los machos llevarán a cabo sus luchas rituales, utilizando para ello sus grandes cornamentas, eligiendo como escenario aquéllos lugares a los cuales suelen acudir las hembras para comer o beber.
Se trata de un evento especialmente recomendable, una experiencia de aquéllas que no se olvidan, y que no debería dejar de ver, por lo menos una vez en la vida, cualquier amante de los animales y de la naturaleza.
Son muchos los puntos de nuestra geografía a los que nos podemos dirigir si queremos escuchar el impresionante sonido de la berrea, existiendo en la mayoría empresas que se dedican a organizar rutas y salidas encaminadas a ello. Muchos espacios naturales de nuestro país son perfectamente aptos para disfrutar de dicho espectáculo, aunque a falta de espacio señalaremos algunos de los más conocidos, teniendo siempre en cuenta el lector que existen muchos más, la mayor parte de los cuales además son parajes de una gran belleza.
PARQUE NACIONAL DE CABAÑEROS
Este hermoso parque se sitúa en la comunidad castellano-manchega, a caballo entre las provincias de Toledo y Ciudad Real. Allí, en sus extensos campos de cereales y dehesas, en los que son abundantes las encinas, es donde habitan los ciervos, y donde encontraremos posiblemente el mejor lugar de toda la comunidad para escuchar la berrea.
El parque se sitúa entre las sierras de Rocigalgo y del Chorrito, y por sus tierras discurren una gran cantidad de ríos, siendo los más importantes el Bullaque y el Estena, ambos afluentes del río Guadiana. No debemos desaprovechar la visita para acercarnos a conocer alguno de los bonitos e interesantes pueblos que se sitúan dentro del espacio natural protegido que supone el parque.
Alojamientos cercanos
Casa Rural Las Tres Rosas: Situada en la localidad de Los Navalucillos, en la provincia de Toledo, junto al Pico de Rocigalgo, es un edificio del siglo XIX, típico de la zona. Ofrece confortables habitaciones con baño y tiene capacidad para 12 personas.
PARQUE NACIONAL DE DOÑANA
Situado en la comunidad andaluza, este emblemático parque se extiende entre las provincias de Huelva, Cádiz y Sevilla, en un enclave privilegiado en que se une el mar Mediterráneo con el Océano Atlántico, lo que propicia que sea el hábitat ideal para un gran número de diferentes especies animales.
Es también un espacio ideal para quienes deseen oír la berrea de los ciervos que bajan de los bosques durante el atardecer en busca de las hembras. El mismo parque organiza las excursiones para asistir al espectáculo, cuya contemplación nos facilita el hecho de que algunas marismas están secas, ofreciéndonos un punto de vista en que podremos observar perfectamente las luchas entre los machos.
Alojamientos cercanos
Casa Rural Auxiliadora: Con una capacidad para 6 personas, es un alojamiento situado dentro de una gran finca, a 20 minutos de Jerez de la Frontera, en la provincia de Cádiz. Ofrece unos hermosos jardines con terrazas, piscina y zona de barbacoa.
RESERVA DE BORMOUT
Esta Reserva se encuentra en la provincia de Lleida, en la comarca del Pallars Jussà. Se trata de una importante zona en cuanto a especies animales, que se convirtió en espacio protegido en el año 1991, pasando a depender del Departamento de Medio Ambiente de la Generalitat catalana.
En un bellísimo entorno, formado por un paisaje típicamente pre-pirenaico, es posiblemente el mejor de los enclaves de esta comunidad para quien quiera escuchar la berrea de los ciervos. En el lugar hay un pequeño observatorio, recubierto con piedras con el fin de que quede perfectamente integrado en el entorno natural en que se halla, y que permite una visión de 360º.
Alojamientos cercanos:
Casa Churchill: Se ubica en un atractivo edificio del siglo XVII, en la localidad de Claverol, en la provincia de Lleida. Ofrece habitaciones con baño y televisor, así como piscina interior climatizada.
PARQUE NATURAL DE REDES
Otro de los espacios recomendables para la observación de la berrea es el Parque Natural de Redes, situado en el Principado de Asturias y declarado Reserva de la Biosfera por parte de la Unesco. Forma parte del Macizo Hespérico, conocido también como Macizo Asturiano, y se halla a los pies de los Picos de Europa, una zona, como todos sabemos de sobras, de una belleza impactante.
Es una zona muy aconsejable para nuestro objetivo, a pesar de que los venados han sido introducidos en este espacio hace pocos años, habiéndose aclimatado muy bien al mismo.
Alojamientos cercanos:
Rurastur: En la localidad asturiana de Ríoseco encontramos este complejo formado por 3 confortables casas, con una capacidad total para 15 personas y, aunque independientes, unidas entre ellas por una espléndida terraza con espectaculares vistas.
Apartamentos Rurales La Cantera: Se trata de 2 apartamentos de 5 plazas cada uno, perfectamente equipados y decorados, que se hallan en el municipio de Sobrescobio, a los pies del Pico La Xarnoca.
Por último, para aquellos viajeros que decidan presenciar el espectáculo de la berrea, caben unos pequeños consejos y precauciones a tener en cuenta, todos ellos deducibles sólo con un poco de lógica, como el hecho de que debemos intentar ser muy silenciosos y no interferir en ningún momento, ni acercarnos a los animales, que si detectan nuestra presencia lo primero que harán es marcharse. Por otro lado, se trata de un tipo de excursión o experiencia que es recomendable realizarla con guía y no a nuestro libre albedrío.