El valle de Lecrín se encuentra al sur de la provincia de Granada, limitando con las comarcas de la Alpujarra, la Costa Granadina, Alhama y la Vega de Granada. Pero lo que le da nombre a esta comarca es el valle en el que se ubica.
El valle de Lecrín está en la vertiente suroccidental de Sierra Nevada y se extiende desde la sierra de los Guájares hasta el Suspiro del Moro. Por lo que discurre entre montañas y bellos parajes que no dejan indiferente a nadie. Además, la comarca está compuesta por ocho municipios y su capital es Dúrcal.
A continuación, te mostramos los mejores lugares que ver en el valle de Lecrín y las actividades que hacer en el valle de Lecrín también que incluyen rutas, los pueblos más bonitos y los parajes más importantes. Además, si estas pensando en hacer turismo por el valle de Lecrín, no dudes en consultar las casas rurales en el valle de Lecrín que tenemos disponibles para moverte por la zona con comodidad.
Qué Ver en el valle de Lecrín
Laguna de Padul
El pequeño pueblo de Padul tiene un fantástico espacio protegido dentro del Parque Natural de Sierra Nevada. Este humedal se puede recorrer mediante la Ruta del Mamut que pasa por diferentes miradores y bonitos parajes. El nombre viene por los restos de este animal prehistórico hallados en el municipio.
Para conocer más sobre la laguna de Padul se puede acudir al Aula de la Naturaleza El Aguadero. Allí cuentan, entre muchas otras cosas, que en el humedal viven hasta 158 especies distintas de aves.
Ermita del Zapato
Pinos del Valle es una localidad dentro del municipio del Pinar. Además de ver el bonito patrimonio de este pueblo, hay una singular ruta que conduce hasta la ermita del Zapato. A este templo dedicado al Cristo del Zapato se llega por medio de un sendero hasta el pico de la sierra.
No es la ermita más espectacular del mundo, pero la ruta es muy bonita y asequible. Al final, no solo se puede ver el austero edificio, también se obtienen las mejores vistas de la zona gracias a este mirador del valle de Lecrín.
Piedra Ventana
Piedra Ventana es una peculiar formación rocosa en forma de arco fruto de la erosión que sufre la zona. Sin embargo, no es un monumento natural sin más que visitar, para llegar a él hay que recorrer un sendero por la Silleta de Padul.
La ruta comienza en Dílar, junto a la ermita de la Virgen de las Nieves. Atravesando la vegetación y los campos sembrados se llega hasta el cerro de la Silleta, donde coger un pequeño desvío hasta Piedra Ventana. Volviendo al sendero circular, se pasa por el puerto de Mala Mujer hasta terminar de nuevo en la ermita.
Puente de Lata
También en el municipio de Dúrcal se encuentra el puente de Lata. Este puente ferroviario fue trasladado hasta el valle del arroyo de Gor donde se había construido originariamente. Actualmente no tiene uso ferroviario, pero sí que se puede atravesar en algunas de las rutas de senderismo en torno al río.
Su singular estética ha hecho que su diseño sea atribuido a Eiffel, autor de la famosa torre parisina, pero en realidad, la teoría más probable es que lo ideara uno de los discípulos: James Livesey.
Castillo de Lojuela
Lecrín, el pueblo que lleva el nombre del valle, tiene entre su patrimonio una imponente fortaleza. El castillo de Lojuela no tiene un tamaño apabullante, pero se sitúa en lo alto de un cerro al margen del río Dúrcal, una ubicación estupenda.
La fortaleza de origen musulmán consta de un recinto amurallado que protege una torre de gran tamaño. Como peculiaridad, la muralla está construida directamente sobre la roca.
Salto de agua del Canal de Fuga
Este es un salto de agua artificial originado por un canal de agua que se encuentra en el municipio de Dúrcal, a unos 50 metros del comienzo de la acequia de Mahina.
Para llegar al salto de agua del Canal de Fuga hay que tomar la Ruta Río Dúrcal o la Ruta Vía Verde de Dúrcal que salen de un instituto del pueblo. Cualquiera de las opciones es buena, ya que con ambas de tarda alrededor de una hora. La diferencia es que una transcurre junto al río y la otra junto a la acequia.
Barranco de Luna en Saleres
El pueblo de Saleres pertenece al valle de Lecrín y tiene una gran joya natural: el barranco de Luna. Este cañón formado por el río Barranco de Luna cuenta con una ruta que lo recorre y que comienza en el cementerio de Saleres.
No hay indicaciones, pero el truco es seguir siempre el camino principal, no las estrechas bifurcaciones que aparecen. El sendero va descendiendo por las rocas hasta llegar al río, donde el paisaje cambia de los árboles frutales a las paredes rocosas del cañón.
Salto de agua Arroyo del Alcázar
Conocido como ‘la cascada del baño’, este pequeño salto de agua de Dúrcal pertenece al arroyo del Alcázar, uno de los afluentes del río Dúrcal. Se llega hasta él pasando los Baños de Urquízar y caminando alrededor de 100 metros.
Aunque el agua está muy fría, es una zona apta para el baño y la poza principal en la que cae el salto de agua es bastante profunda, aunque hay otras más pequeñas más adecuadas para niños.
Castillo de Zoraya
Cuenta la leyenda que el castillo de Zoraya fue un regalo del sultán nazarí Muley Hacen a su segunda mujer, Isabel de Solís, que se convirtió al islam tomando el nombre de Zoraya.
Sea como fuere, esta fortaleza se encuentra en una pequeña colina del pueblo de Mondújar, por eso se le conoce también como castillo de Mondújar. El edificio de estructura irregular data del siglo XV y, aunque su estado no es excelente, mantiene alguna de sus estancias y, sobre todo, su ubicación en uno de los parajes más bonitos del valle de Lecrín.
Ruta del Azahar (Melegís-Saleres)
La Ruta del Azahar es otro de los senderos que recorre una zona del valle de Lecrín entre naranjos y otros árboles frutales, concretamente desde el pueblo de Melegís hasta Saleres pasando por Restábal. El sendero está muy bien señalizado y es apto para niños.
Pueblos que visitar en el valle de Lecrín
Dúrcal
El municipio de Dúrcal es uno de los principales pueblos que ver en el valle de Lecrín. Como dato distintivo, el término municipal se encuentra dentro del bonito Parque Nacional de Sierra Nevada.
A lo largo del texto ya hemos hablado de algunos parajes y lugares de interés que ver en el valle de Lecrín como el puente de Lata o el salto de agua del Canal de Fuga, pero no hay que dejar de pasear por el casco histórico del pueblo y contemplar sus monumentos.
Lecrín
Otro de los pueblos imprescindibles que visitar en el valle de Lecrín es el que lleva su nombre. Además del Castillo de Lojuela del que hemos hablado anteriormente, hay diferentes monumentos que ver como las termas romanas del Feche de Mondújar. Un bonito pueblo con una sorprendente historia rodeado de un precioso entorno natural.
Nigüelas
Nigüelas es uno de los pueblos del valle de Lecrín que pasa desapercibido, aunque destaca por ser la localidad más elevada. Sin embargo, cuenta con la almazara más antigua de España y con un importante monumento natural que no hay que perderse dentro de la comarca: la falla de Nigüelas. Este accidente geológico se debe a un deslizamiento del terreno que rompió la corteza y que formó grandes bloques rocosos.
El Pinar
Sobre un cerro con vistas al pantano de Béznar y bajo la colina que corona el santuario dedicado al Cristo del Zapato del que ya hemos hablado al principio, El Pinar es otro de los imprescindibles dentro del valle de Lecrín. En su término municipal está el puente de Tablate y el castillo de la Venta de la Cebada.
Albuñuelas
Por último, Albuñuelas es otro pequeño pueblo situado a los pies de sierra Nevada, en la sierra de Almijara. Dividido varios barrios, el municipio tiene un interesante patrimonio monumental y, especialmente, un bonito entorno. Al estar ubicado sobre un acuífero, por los alrededores hay mucha frondosidad, fuentes, acequias y un río.
Mapa del Valle de Lecrín en Granada
