Casas rurales en La Noguera

de Cataluña. Su territorio tiene una parte montañosa y otra parte más llana, lo que provoca su división en Noguera Alta y Noguera Baja. La cruzan los ríos Segre, Noguera Ribagorzana y Noguera Pallaressa, destacando sus cultivos de cereales, así como sus olivos y árboles frutales.

Se trata de una comarca ideal para el turismo rural, con zonas muy adecuadas para el senderismo, para la escalada, la espeleología o el ciclismo, entre otras.

En sus tierras se han encontrado importantes yacimientos arqueológicos, siendo abundantes las expresiones de arte rupestre, de manera especial el que se ha venido llamando Arte Levantino, que se calcula data de hace unos 10000 años. Así, encontramos muestras de este arte, junto con otras de arte esquemático de hace unos 6500 años, en poblaciones como, Os de Balaguer, Artesa de Segre o Camarassa, entre muchas otras, encontrándose declarado el conjunto Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.

A pesar de ser una comarca, tal y como hemos mencionado, muy extensa, está poco poblada, y por ello no ha sido excesivamente tocada por la mano del hombre, por lo que presenta paisajes y escenarios naturales de gran belleza, como el llamado Pas de Terradets, por donde pasa el río Noguera Pallaressa al cruzar por entre las montañas de Montsec, vertiendo luego sus aguas en el pantano del mismo nombre. Es un espacio muy atractivo y con una buena infraestructura en lo que se refiere a casas rurales y centros dedicados a las prácticas deportivas.

Como otro de sus parajes más interesantes, se puede citar la Sierra del Montsec, una cordillera de unos 40 kilómetros en la que se halla un impresionante desfiladero. En ellas se encuentra situado el observatorio astronómico del Montseny, en el que se encuentra el telescopio, tecnológicamente hablando, más avanzado de la comunidad. Se ubica en el término municipal de San Esteban de la Sarga.

El viajero dispone de una importante cantidad de lugares interesantes para visitar dentro de la comarca, como Balaguer.

Balaguer es un municipio con una gran carga de historia a sus espaldas, lo que se traduce en un extenso legado arquitectónico y artístico. En la localidad podremos ver entre otras obras su iglesia de Santa María, un bello edificio gótico, así como el Convento de Sant Domènec, del siglo XIV, su iglesia románica de Sant Salvador, el puente gótico de San Miquel, los vestigios de su castillo Formós, y las murallas de la localidad, levantadas en el siglo XI.

Su gastronomía está basada en los productos de la tierra, siendo muy populares algunos platos como los caracoles con allioli o a la llauna, así como las cocas de recapte.