Casa Regina

En la planta baja, el alojamiento cuenta con las zonas comunes: una enorme cocina (llar tradicional asturiano) totalmente equipada con los electrodomésticos y los utensilios necesarios, un comedor independiente con capacidad para 20 personas, un salón con sofás frente a la chimenea y una pequeña biblioteca.

En la primera y segunda planta de Casa Regina se distribuyen sus 7 dormitorios con sus respectivos cuartos de baño completos con secador de pelo y bañera o ducha. El primer piso tiene 5 habitaciones dobles, 3 con camas individuales y 2 con cama de matrimonio.

El segundo piso tiene 2 habitaciones dobles con cama de matrimonio. Todas ellas tienen televisión, termostato para regular la temperatura y toda la lencería necesaria.

En el exterior, Casa Regina está dentro de una finca privada con 6000 metros cuadrados.

Aunque parte de ese terreno no es accesible porque se usa para otras funciones, la mayor parte del jardín es de uso exclusivo de los huéspedes. Hay un típico hórreo asturiano bajo el que se pueden organizar comidas y cenas al aire libre y una barbacoa, además del mobiliario de exterior. El alojamiento tiene una zona de aparcamiento exclusivo para los clientes con capacidad para más de 8 coches.

La localidad costera en la que se encuentra Casa Regina cuenta con todos los servicios que pudieran ser necesarios durante la estancia. A 5 minutos del alojamiento están las playas de Perlora y de la vecina Candás, un entorno idílico de la costa central de Asturias. Su ubicación es ideal para conocer los lugares más turísticos de la zona, ya que Avilés y Gijón están a 17 kilómetros y Oviedo a 32 kilómetros. Pero los pueblos más bonitos de Asturias también están cerca: Cudillero, Tazones, Ribadesella, Llanes… ¡Hay tantos! Como no, los lugares naturales como los Picos de Europa, los lagos de Covadonga, Fuente Dé o cabo Vidio. Y es que Asturias es perfecta para organizar actividades al aire libre como el senderismo por famosos senderos como la ruta del Cares, deportes acuáticos como el descenso del Sella o, simplemente, conocer la fauna, la flora y, por supuesto, la rica gastronomía local.