Otros lugares para Turismo Rural en Lugo
Poblaciones de Lugo con alojamientos rurales
- A Fonsagrada
- A Pastoriza
- A Pobra do Brollón
- A Pontenova
- Abadín
- Alfoz
- Antas de Ulla
- As Nogais
- Baamonde
- Baleira
- Baralla
- Barreiros
- Becerreá
- Begonte
- Bóveda
- Burela
- Carballedo
- Castro de Rei
- Castroverde
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- Cervo
- Chantada
- Chavín
- Cospeito
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- Escairón
- Folgoso do Courel
- Foz
- Friol
- Guitiriz
- Guntín
- Láncara
- Lourenza
- Meira
- Mondoñedo
- Monforte de Lemos
- Monterroso
- Muras
- Navia de Suarna
- Negueira de Muñiz
- O Cebreiro
- O Corgo
- O Incio
- O Páramo
- O Saviñao
- O Valadouro
- O Veral
- O Vicedo
- Ourol
- Outeiro de Rei
- Palas de Rei
- Panton
- Paradela
- Pedrafita do Cebreiro
- Piornedo
- Pol
- Portomarín
- Quiroga
- Rábade
- Ribadeo
- Ribas de Sil
- Ribeira de Piquín
- Rinlo
- Riotorto
- Samos
- San Cibrao
- San Pedro de Viana
- Sarria
- Sober
- Taboada
- Trabada
- Triacastela
- Vilalba
- Vilaquinte
- Viveiro
- Xermade
- Xove
Las regiones y zonas rurales más visitadas en Lugo
- Los Ancares
- Rías Altas
- Tierra de Lemos
- Ulloa
- Ribeira Sacra
- Cañones del Sil
- A Mariña Lucense
- Camino de Santiago
Alojamientos rurales en Lugo
Escapadas rurales en Lugo
Provincias Limítrofes
El turismo en Lugo
Lugo es una de las provincias más sorprendentes de España. Su apasionante historia milenaria, su ubicación como puerta de entrada a Galicia del Camino de Santiago y cuna del río Miño, sus grandes macizos montañosos, sus verdes prados y frondosos bosques autóctonos, y sus espectaculares playas convierten a esta provincia en todo un paraíso para los turistas rurales.
La provincia se divide en cinco grandes áreas de costa e interior que, con sus propias singularidades, ofrecen una serie de atractivos naturales, culturales, históricos, gastronómicos… Son A Mariña, las Tierras de Miño, la montaña lucense, la Ulloa y la Ribeira Sacra. La Mariña lucense ocupa la zona norte y costera de la provincia, donde se encuentran los municipios de Ribadeo, Barreiros, Foz, Burela, Cervo, Xove, Viveiro, O Vicedo, Trabada, A Pontenova, Riotorto, Lourenzá, Mondoñedo, Alfoz, O Valadouro y Ourol. El litoral lucense sorprende por sus grandes acantilados y playas agrestes, muchas de ellas vírgenes, y entre las que destaca sobremanera la famosa playa de las Catedrales (playa de Aguas Santas), en el municipio de Ribadeo, declarada Monumento Natural por sus extraordinarias y únicas formas de las bóvedas, arcos, galerías y cavernas que el agua y el viento han esculpido en las rocas a lo largo de los siglos, hasta formar este maravilloso paraje. En A Mariña se encuentran también buenas muestras del pasado celta de Galicia. Dólmenes y castros conviven con numerosos monumentos medievales que nos hablan de una tierra con un pasado apasionante. En Mondoñedo podemos admirar monumentos que nos llevan a la época en la que esta localidad fue capital provincial del Reino de Galicia: su catedral, declarada Monumento Nacional en 1902, fue consagrada en el año 1246; la Fonte Vella, de 1548, conocida también como la fuente del genial escritor Álvaro Cunqueiro, situada frente al Palacio Episcopal; el Seminario Conciliar, tercero que se construyó en España; el Santuario dos Remedios… Tampoco hay que dejar de visitar el conjunto arquitectónico y la ría de Ribadeo, que tienen la consideración de Bien de Interés Cultural, y la zona antigua de Viveiro, declarada Conjunto Histórico-Artístico. También destacan como lugares de interés histórico Lourenzá, Alfoz y Sargadelos, esta última, la localidad donde se inició la fabricación de la cerámica mundialmente famosa de mismo nombre. En la parte central de la provincia se encuentran las Tierras de Miño y la montaña lucense. La primera, en la cuenca alta del río Miño, fue declarada Reserva de la Biosfera por la UNESCO. Aquí encontramos ecosistemas fluviales, las lagunas de los ríos Parga-Ladra-Támoga y la Sierra do Xistral en una zona de enorme valor ecológico y de aguas medicinales, y salpicada de restos romanos y castreños entre los que destacan una de las muestras más importantes que se conservan de la civilización romana: la muralla de Lugo, Patrimonio de la Humanidad. Próxima se encuentra el área de la montaña lucense, la barrera natural entre Galicia y Castilla que forman las sierras de O Caurel y los Ancares; una zona de altos picos y frondosos bosques de castaños, robles, nogales, tejos, avellanos y acebos, en los que abundan jabalís, corzos, ciervos e infinidad de aves. Es en esta zona donde se encuentra Pedrafita do Cebreiro, entrada en Galicia del Camino de Santiago, con su Santuario de Santa María la Real. Al sur de Tierras de Miño se encuentra el área de Ulloa, en el centro de Galicia, tierra de fértiles pastos, de cría de ganado y de fabricación de productos lácteos tan famosos como el queso de vaca con denominación de origen de Arzúa-Ulloa. Y ya lindante con la provincia de Ourense se halla la espectacular Ribeira Sacra, donde se hallan los impresionantes cañones del Sil y los viñedos de los que salen algunos de los mejores vinos de Galicia. Es también zona de bosques centenarios atravesados por senderos y de un destacado patrimonio románico que se conserva en pueblos como Monforte de Lemos, Chantada, Pantón, Portomarín, O Saviñao, Sober…