Aguas del Beyo Jacuzzi

En cuanto a la habitación, decorada con un cierto toque oriental, tiene un jacuzzi redondo para dos personas a ras de suelo. Además, en la casa encontraremos ropa de baño y de cama, así como detergente para la lavadora, jabón lavavajillas e incluso papel higiénico, para dos días.

La casa admite mascotas, por lo que podemos llevar con nosotros a la nuestra si así lo deseamos.

El enclave del alojamiento, rodeado por las imponentes cumbres de los Picos de Europa y junto al río Sella, ofrece un sinfín de posibilidades en cuanto a las prácticas deportivas y actividades al aire libre. Incluso encontraremos muy cerca una empresa de aventuras en la que podremos disfrutar de un parque en la que han instalado puentes tibetanos, vías ferratas y tirolinas, pensando en todos los públicos y en personas de todas las edades.

En la pequeña aldea en la que nos encontramos, San Ignacio, podremos contemplar algunos de los últimos hórreos de la comunidad asturiana, y en Ponga, municipio al que pertenece, podremos admirar algunas de las obras que componen su legado histórico, como el Palacio de Sobrefoz o la Iglesia de San Juan de Beleño.

Quienes sean aficionados a los paseos y caminatas podrán hacerlos por lugares llenos de parajes de gran belleza, como el valle de Sajambre, el valle de Angón o el Bosque de Peloño.

El enclave es ideal también para quienes deseen disfrutar al mismo tiempo del mar y la montaña, ya que a tan sólo 50 minutos se encuentran algunas de las más hermosas playas asturianas, como la de Ribadesella o la de Llanes, donde en la época de buen tiempo podremos disfrutar de un agradable baño e incluso de la práctica de deportes náuticos.

En las proximidades tenemos también municipios que no deberíamos dejar de visitar, tan populares y bellos como Cangas de Onís o como Covadonga, esta última con sus famosos Lagos.